Dibujamos el escudo del arzobispo de Pamplona Tudela
El mandato de Florencio Roselló al frente de la Iglesia Navarra va a estar presidido por un nuevo escudo diseñado por Fray Rafael Nieto.
El Arzobispado lo ha hecho público tras su ordenación episcopal en la Catedral de Pamplona y viene a representar por un lado la caridad, y por otro, algunas cuestiones e icónicas imágenes para el nuevo Arzobispo.
El escudo se compone de cuatro partes. En la parte superior izquierda se encuentra la torre de Alcorisa (Teruel), pueblo natal de
Roselló, con la que se recuerda sus orígenes religiosos: su nacimiento a la fe, la celebración de la comunión, la confirmación y su ordenación sacerdotal.
En la parte superior derecha aparece la Virgen de la Merced copia de la imagen que preside la capilla de la cárcel de Castellón. A esta advocación está acogida la Orden de la Merced, a la que pertenece en nuevo arzobispo.
En la parte inferior izquierda se ve a Cristo rompiendo cadenas, en recuerdo de su vida sacerdotal y de su ministerio: romper cadenas y ataduras, especialmente de la gente pobre, y su deseo de seguir rompiendo cadenas y trabajando por la libertad de las personas.
Finalmente, en la parte inferior derecha figura un corazón que sangra. Hace referencia a su lema episcopal, «si no tengo amor, no soy nada». Su vida y compromiso es, y quiere ser desde el amor.
Desde el Arzobispado se incide en que “las dos imágenes inferiores -Cristo rompiendo cadenas y corazón sangrando- están dibujadas por una mujer presa. Las referencias a ese ministerio anterior le recuerdan que nació y se consagró para el servicio, la entrega, y para el amor”.